viernes, 11 de marzo de 2011

Vigésimo Tercer Capítulo: El día después (Parte dos)

En ese momento salió Phoebe de su cuarto.
-Buenos días.- dijo aún adormitada.
-Buenos días. - le contesté.
-Qué es eso?- dijo al ver el ramo de flores.
-Amm... Flores? - le dije.
-Mch. Obvio que sí, pero de dónde las sacaste? - dijo.
-Las enviaron.- dije.
-Son para vos, entonces?- dijo.
-Supongo que sí porque el mensajero pregunto por Adda.- dije abriendo la tarjetita.
-Dejáme ver! Dejáme ver! - dijo emocionada.
Le extendí la tarjeta y ella me la arrebató.
-Y si no me la arrebatás? - dije sarcásticamente.
-No mirás que estoy emocionada por vos? - dijo abriéndola.
Sólo me quedé parada ahí mientras Phoebe leía la tarjetita.
-Gonzalo....? - dijo.
-No... Íker Casillas. - le dije sarcásticamente.
-Ay! Perdón.- dijo.
-No es justo!- dijo.
-JAJA. Y por qué no es justo?- pregunté.
-Vos recibís algo de Gonzalo la mañana siguiente a conocerlo. Y yo qué? Ni señas de Sergio! - dijo.
-JAJAJAJA! Tranquila. Más de alguna señal dará. - le dije.
-Tendré fe. - dijo.
-Me voy a bañar. - dije.
-Sí, dale.- dijo Phoebe.

Salí de bañarme y arreglarme cuando vi a Phoebe hablando con un chico de pelo castaño oscuro, aparentemente alto, sentado en el sofá.
-Hola? - dije asomándome.
-Hola! - dijo el chico.
-Uh! Por cierto, ella es mi compañera de apartamento. - dijo Phoebe levantándose de su asiento.
-Mucho gusto - dijo el chico. - Me llamo Fernando.
-Mucho gusto Fernando. - dije.
-Ella es Adda. - dijo Phoebe.
-Bonito nombre- dijo Fernando.
-Amm. Lo siento, ando un poco ida. - le dije.
-No te preocupes. - dijo él, mostrando una sonrisa impecable.
-Disculpen, yo ahorita regreso.- dijo Phoebe.
-Adelante. -dijo Fernando.
Ambos nos quedamos solos en la sala, al principio hubo un silencio que se vio interrumpido por ambos...
-Tú - dijimos ambos al mismo tiempo.
-JAJA, perdón. Decías?- me dirigí a él.
-Vivo en el departamento de al lado. Escuché que se habían mudado dos personas a este departamento y pensé en venir a dar la bienvenida. - dijo.
-Oh! Gracias. - le dije sonriendo.
-Así que... Bienvenidas.- dijo el sonriendo.
-Gracias, es muy lindo de tu parte. - dije.

Era imposible negarlo. Fernando era hermoso, tenía una sonrisa perfecta, una voz que derretía y era súper amable y encantador. Tenía un carisma que me atraía, un carisma que era imposible ignorar. Y siendo sincera, me atraía fatalmente.

1 comentario:

  1. Siguela♥ me encanta tu nove, la leí toda para poder comentarla (: pasate :D

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